A mi amiga María Mestanza

Ya han pasado muchos años

de la panda que formamos,
por ser madres de unas niñas
a las que al cole, llevamos.

Fue una época tan bonita

que siempre recordaremos,
todas éramos muy jóvenes
fueron años placenteros.

El tiempo se fue pasando

y nuestras niñas creciendo,
cierto es que nosotras dos
nunca dejamos de vernos.

Todos los jueves sin falta

acudíamos al mercado,
se nos iba la mañana
con todos, teníamos trato.

A rezar a Santa Gema

las dos juntas siempre vamos,
la hemos pedido mil cosas
también las gracias la damos.

María es una malagueña

que nunca perdió su acento,
es simpática y salada
tiene buenos sentimientos.

Primero buena hija fuiste

gran esposa y feliz madre,
adorabas a tus hijos
tu familia era intachable.

Los Mestanza y los Barea

siempre disteis buen ejemplo,

de estar todos tan unidos

con cariño verdadero.

Cuando tu esposo enfermó

no faltaste de su lado,
él, era una gran persona
le tuviste bien cuidado.

Al quedarte tú tan sola
seguiste siendo valiente,
has estado muy enferma
eres una mujer fuerte.

Los años por ti no pasan

tu pelo tan colocado,
con tus labios perfilados
estilosa y arreglada.

Sé que estás muy orgullosa

de tus siete nietecillos,
cuando ves como los grandes
cuidan de los chiquitillos.

Solo me queda desearte
pases un feliz verano
en tu pueblo, con tu Reme,
tus sobrinos y cuñados.

CHURRIANA (MALAGA)