SEMANA SANTA DOS MIL TRECE



 

Ya de todos es sabido

que estos días tan señalados,
nunca tiene fecha fija
según nuestro calendario.

La primera luna llena

que nos trae la primavera,
hace que ese domingo
Pascua,  de Resurrección sea.

Este año dos mil trece

cayó a finales de marzo,
ha sido lluviosa y fría
mucha gente lo ha llorado.

Las famosas procesiones

que en Andalucía celebran,
pocas pudieron salir
con el trabajo que llevan.

Meses enteros se pasan

ensayando con los pasos,
por las calles andaluzas
los costaleros cargados.

Gastos de flores y cirios

todo se queda arruinado,
por eso la gente llora
quedan desilusionados.

Ha sido por toda España
lluvia y frío no han cesado.             

Ya llevamos varios meses
los campos están calados.

 

Los ríos inundan pueblos

destrozan todo a su paso,
la gente lo pierde todo
eso si es para llorarlo.

A ver si llega la calma

saliendo el sol con su rayos,
y nos de  tranquilidad
serenándose los ánimos.

Yo soy una enamorada

de los paisajes del campo,
las cumbres llenas de nieve
la lluvia  las va arrastrando.

Las flores de los almendros

todas las ha deshojado,
el suelo con hojas blancas
parece que se ha alfombrado.

Los arroyos han crecido

el agua corre cantando,
y cuando llegan al río
se escucha por todo el campo.

Si lo sabes disfrutar

pasas ratos estupendos,
ya que te llenas de paz
y todo lo sientes bello.